Reseña: Hija de Humo y Hueso, de Laini Taylor

Título: Hija de Humo y Hueso (Hija de Humo y Hueso #1).

Autora: Laini Taylor.

Editorial: Alfaguara.

Género: Juvenil romántica.

Número de páginas: 464.

ISBN: 978-84-204-1098-2.

Trilogía Hija de Humo y Hueso:

• Hija de Humo y Hueso.
• Días de Sangre y Resplandor (a la venta el 6 de marzo).
• Sin título.

Karou es una estudiante de arte de 17 años que vive en Praga. Pero ese no es su único mundo. A veces, Karou desaparece en misteriosos viajes para realizar los encargos de Brimstone, el monstruo quimera que la adoptó al nacer.

Tan misteriosa resulta Karou para sus amigos, como lo es para ella su propia vida: ¿cómo es que ha acabado formando parte de una familia de monstruos quimera? ¿Para qué necesita su padre adoptivo tantos dientes, especialmente de humanos? Y, ¿por qué tiene esa recurrente sensación de vacío, de haber olvidado algo?

De pronto, empiezan a aparecen marcas de manos en las puertas, señal de que la familia de Karou corre grave peligro. Karou tratará de cruzar al mundo quimérico para ayudarles, pero es perseguida por los serafines. Entre ellos se encuentra Akiva, un ángel arrebatadoramente hermoso al que Karou está unida de forma que ni ella misma puede imaginar.

Hija de Humo y Hueso, en un principio, pasó desapercibido antes mis ojos. Un año más tarde de su publicación, volví a leer sus sinopsis (tanto ésta que os he dejado como la que aparece en la contraportada) y ¡vaya! La historia inducía a pensar que encontraría algo bien diferente. Las críticas de muchos bloggers apuntaban en esa dirección también, así que me hice con el libro finalmente.

Iba, pues, sin expectativas altas. Sabía que encontraría amor (¿es qué hay algún libro juvenil que carezca de él?) pero estaba dispuesta a tolerarlo y disfrutarlo si éste estaba bien planteado. Y es ahí dónde he encontrado el gran pero de esta novela: el apartado amoroso. Pero vayamos por partes.

Las primeras partes de Hija de Humo y Hueso resultan realmente innovadoras: no sólo por la introducción de las quimeras, elemento de por sí original y poco usado (o nada) en la literatura juvenil, sino por cómo son los personajes, especialmente Karou, nuestra peculiar protagonista peliazul. Me he identificado muchísimo con ella en algunas situaciones. Karou es muy tenaz. Si hay algo que quiere, no parará hasta conseguirlo, le lleve más o menos tiempo. Otro rasgo de ella que me gusta es que sabe organizar sus prioridades. Cierto es que no todo me ha convencido en ella pero espero seguir conociéndola en Días de Sangre y Resplandor. Mi personaje favorito se encuentra entre las quimeras: Brimstone. Con él he tenido una relación irregular: al principio me gustaba, luego no… finalmente he acabado adorándolo. Qué gran corazón el suyo. A pesar de su aspecto animal es mejor que muchos humanos. Y en esta línea encuentro una crítica a la superficialidad por parte de la autora, que empezó genial pero que al final –y para mi decepción- se cayó por su propio peso. Si vas a criticar el apego de la gente por la belleza, quizás usar a Madrigal (que presenta un aspecto muy humano para ser quimera) no sea lo mejor.

Sólo llegamos a conocer en mayor profundidad a Karou y Akiva. Me habría gustado saber más del resto de personajes, la verdad. Y más si tenemos en cuenta lo mal que ha acabado cayéndome Akiva. Hay un tema en especial que me encantaría sacar a colación pero no puedo por los spoilers. Diré, para los que han leído el libro, que no sólo se trata del final en sí. Y hasta ahí puedo leer.

El final. Me ha dejado un muy mal sabor de boca. Ha conseguido incluso enfadarme. Tampoco puedo entrar en detalles pero señalaré un único culpable: el amor. No ese amor que evoluciona lentamente, no, sino, una vez más, el ya conocido por todos “amor 24 horas”. No sólo no convence (pese a que la autora trate de darle una explicación más o menos racional) sino que cobra excesivo protagonismo en el libro, hasta el punto de ser de lo único que versa éste: del amor. Una pena, ya que la trama primera que se nos presenta sí resultaba sumamente atrayente y digna de ser devorada en un plis. Pasé de leer a un ritmo frenético a casi ni tocar el libro porque estaba cansada de leer sobre el mismo tema una y otra vez… ¡y no acababa, oye!

A estas alturas pensaréis: ¿pero te ha gustado, no? ¡Cuéntanos lo bueno! Como siempre, a la hora de reseñar hablo de las dos caras de la moneda. Como dije antes, la trama del principio es genial. Los protagonistas convencían (al menos, la mayoría) y el libro se leía prácticamente solo. No es un libro para nada previsible (y esto sí es digno de alabar). Me montaba teorías y ninguna acertaba, ni de lejos. Hay buenos giros y, por lo que he ido leyendo, Días de Sangre y Resplandor dista mucho de hablar de amor (¡por fin!). Le daré una oportunidad, aunque lleve ciertas reticencias (con Akiva especialmente). Aparte, sí debo reconocer que la historia de amor, aunque no me convenza por muchos motivos- sí es bonita. Y esto a los amantes de la literatura juvenil romántica os puede gustar mucho.

¿Más puntos positivos? Me he reído mucho. Zuzana (mejor amiga de Karou) bien podría estar algo estereotipada pero saber hacer reír y se muestra comprensiva con la forma de vida de su amiga. Otra gran baza a favor es la ambientación del libro. Perfecta. Nos transporta por completo a cada escenario de la historia e incluso crea nuevos (Eretz con sus dos caras: Loramendi y Astrae). Sin duda Taylor goza de una gran imaginación que espero también podamos disfrutar en el segundo libro. ¿Y qué decir del tema de los deseos? Muy original también. Y sorprendente.

La escritura de la autora cumple con la función de entretener, enganchar. La mayoría de las veces se limita a eso pero en ocasiones crea frases (o momentos) para el recuerdo. Os dejo una (tranquilos, no es spoiler).

-Quiero que sepas que nunca te abandonaré… sin más.Cuando levantó la cabeza sus ojos de reptil aparecieron nublados por el agotamiento.-Es imposible saber lo que uno hará –dijo agarrando el hueso de la suerte- No te tomo la palabra.

Por mi parte, leeré la continuación aunque iré con cuidado. ¡Ya os contaré!

Puntuación:
3,5/5.

Autora:

Laini Taylor es autora de las novelas Blackbrinder y Silksinger, ambas de la saga Dreamdark. Ha sido finalista del National Book Award con su novela Lips Touch.