Reseña: Harry Potter y las reliquias de la muerte

Título original: Harry Potter and the deathly hallows.
Título al español: Harry Potter y las reliquias de la muerte.
Autora: J.K. Rowling.
Editorial: Salamandra.
Nº de páginas: 636.
ISBN: 978-84-9838-140-5

Sinopsis:
La fecha crucial se acerca. Cuando cumpla diecisiete años, Harry perderá el encantamiento protector que lo mantiene a salvo. El anunciado enfrentamiento a muerte con lord Voldemort es inminente, y la casi imposible misión de encontrar y destruir los restantes Horrocruxes más urgente que nunca. Ha llegado la hora final, el momento de tomar las decisiones más difíciles. Harry debe abandonar la calidez y seguridad de La Madriguera para seguir sin miedo ni vacilaciones el inexorable sendero trazado para él. Consciente de lo mucho que está en juego, sólo dentro de sí mismo encontrará la fuerza necesaria que lo impulse en la vertiginosa carrera para enfrentarse con su destino.

Opinión personal (con spoilers):
Cuando cogí este libro en la biblioteca no tenía muchas expectativas, a decir verdad. Había leído que era muy bueno, pero después de Harry potter y el príncipe mestizo no quería confiarme demasiado. Sin embargo, ahora puedo afirmar que, o es mi libro favorito, o está entre ellos. Es tan genial que duele terminarlo.

Desde un principio hay acción, sentimientos a flor de piel, personajes totalmente verosímiles que te transportan a su mundo con una facilidad pasmosa. Harry ya me gustaba como personaje, pero este libro abre los ojos: la vida tan dura que ha tenido, las decisiones que tiene que tomar si quiere seguir con vida, su valentía, su coraje, las dudas que se ciernen sobre él con respecto al que fuera director de Hogwarts, Dumbledore…

Durante todo el libro, vives ese difícil camino junto con Harry, protagonista indiscutible del libro. Vives la confusión que siente y el dolor al ver que sus amigos mueren a su alrededor, por él, por la causa de derrocar a Voldemort.

Hermione, nunca me ha desagradado, pero en este libro me ganó desde el principio. Su lealtad a Harry es increíble, ella también lo pasa muy mal, pero continúa con él hasta el final. Cuando leía, veía a una mujer hecha y derecha, no a una chica de 17 años. Sin duda, fue clave para que Harry superara las barreras y siguiera adelante.

La marcha de Ron fue uno de los momentos más inesperados del libro, y más dolorosos. Sin embargo, el hecho de que en seguida se arrepintiera y desease volver, lo arregla. A saber cuántos habrían aguantado la tensión de llevar encima un horrocrux sin marcharse. Me da que muy pocos.
Volvió, que es lo que cuenta.
Y su historia con Hermione, aunque sólo haya un beso en todo el libro entre ellos, te mantiene enganchado/a hasta el final. Son tal para cual porque el uno complementa al otro.

Lupin, Tonks, la familia Weasley, Aberthford, Hagrid, Luna, Neville, Snape… los secundarios son increíbles. Dan mucho juego a la historia, ayudan a desvelar verdades que llevaban en el tintero mucho tiempo, ayudan a Harry y sus amigos…

Sobre los secundarios, tan sólo comentar que mis favoritos son Lupin, Aberthford y Dumbledore.

Lupin lo pasa fatal cuando Tonks queda embarazada, pero porque sufre por el chico. Cuando leía sus líneas, sentía el dolor, eso es algo que no está al alcance de muchos escritores. Además, es valiente como el solo y un buen tipo. Su muerte fue muy inesperada para mí, no como la de Fred, que ya sabía que moriría por spoilers. Me hubiera gustado mucho que Lupin no muriese, sinceramente, fue un momento amargo.

Aberthford: personaje revelación a mi opinión. Nos cuenta la verdadera historia sobre Ariana y su familia, y su posición es muy complicada: hermano mediano que ve como su hermano mayor descuida a la pequeña; sus padres ya no están y eso lo empeora considerablemente.
Cuando salva a Harry, Hermione y Ron de los mortífagos, le amé. Es un personaje muy grande, lastima que no apareciera en los libros anteriores.

Dumbledore: la duda constante. Pensaba para mí misma que “no todos los buenos son tan buenos”. Eso es lo que mejor le definía, y desde luego, era verdad. Pero así es la vida, la gente comete errores, pero Dumbledore no era mala persona, se estuvo arrepintiendo a lo largo de toda su vida. Ese capítulo en King´s Cross me emocionó mucho y me devolvió la confianza total en este personaje. Chapeau.

Pese a que el libro trata sobre un mundo mágico, creo que plasma a la perfección la realidad. Me explico: en la vida hace falta coraje, y Harry nos da para dar y tomar. Las penurias que pasa el chico, y las ganas de vivir que tiene pese a eso… su valor es digno de admiración. Además, si recordáis a Rita Skeeter, recordaréis también la historia que cuenta sobre lo ocurrido con los Dumbledore. Nada más lejos de la verdad. Eso pasa constantemente, la gente inventa, transforma la verdad a su gusto, y ese tipo de cosas hacen mucho daño a las personas que involucran. Somos muchísimo más complejos de lo que a priori parece. Muchos deberían dejar de juzgar e intentar ver más allá.

Me ha encantado. De los 36 capítulos, sólo hay dos momentos concretos dónde decae la acción: en la Madriguera y cuando los chicos se encuentran en el Refugio, casa de Bill y Fleur. Todo lo demás es pura acción.

Seguramente, me deje cosas sin escribir, no quiero que esta reseña sea excesivamente larga (ya lo es). Espero haber sido capaz de plasmar lo que me han hecho sentir los personajes, la autora.

Puntuaciones:
Portada: 4
Cómo está escrito: 5
Ritmo: 5
Amor: 2
Intriga: 5
Nota final: 5